En el mes de octubre del año 2008, un grupo de Sigseños decide fundar un club que les permita participar en las famosas Jornadas Deportivas Vacacionales del Sígsig. El abogado de la agrupación comunica a los asistentes que no existe esa posibilidad, es por ello que fue necesario tomar el nombre de un club que haya participado anteriormente en dicho evento; además se indicó que es importante hacer presencia social a través de actos que posicionen al club dentro de la colectividad.

Por esta razón se decide realizar un concierto que le brinde al club y a nuestra tierra, Sígsig, la oportunidad de ganar renombre a nivel nacional e internacional, entre risas y bromas se escucho una voz que anunciaba: ¡Que tal si traemos a Enrique Bunbury!, pero nadie lo vio como una posibilidad accesible.

Sin embargo, el delegado de nuestra agrupación realiza los contactos pertinentes con los representantes legales del artista Español, mostrando negociaciones bastantes adelantadas. Estas prosperaron hasta el mes de abril en donde se veía muy lejos la posibilidad de confirmar su llegada debido a los altos costos que demanda este tipo de espectáculo.

Pero quienes conformamos el Club Saltamontes insistimos en tal proyecto y continuamos con una serie de reuniones y acercamientos con instituciones públicas que en este momento apoyan el proyecto.
Tras varios meses de negociación el día martes 28 de julio el anhelado propósito vio la luz, llegando a un acuerdo definitivo con el manager del artista en América Latina.

El pasado 5 de agosto del 2009, se confirma su presentación el 10 de octubre del 2009 en el estadio Municipal del Cantón Sigsig.

La noticia fue tan relevante que inmediatamente los organizadores del evento reciben un sin número de llamadas telefónicas que piden ratificar esta información; sin embargo la comunidad del Austro ha seguido incrédula ante tal noticia.

Hoy el sueño se hace realidad, gracias a la colaboración y la entrega del Club Saltamontes, junto al apoyo de la comunidad Sigseña, la que a través de este evento ve una posibilidad de mostrar al mundo las riquezas arqueológicas, culturales, naturales así como la calidez de su gente.